La teología es una reflexión sobre la fe y la fe lo que tiene que hacer es movilizar a las personas para cambiar.
Gustavo Gutiérrez Merino
El estudio no se mide por el número de páginas leídas en una noche, ni por la cantidad de libros leídos en un semestre. Estudiar no es un acto de consumir ideas, sino de crearlas y recrearlas.
Paulo Freire
El día de ayer nos enteramos de la muerte de Don Samuel Ruiz, Obispo emérito de la ciudad de San Cristóbal de las Casas, Chiapas; sin duda una enorme pérdida por donde quiera que se le vea.
Don Samuel fue uno de los principales impulsores en México de la corriente filosófica denominada “Teología de la liberación” aquella que nació en los años sesentas posterior al II Concilio Vaticano y que contara con destacados ideólogos; como el sacerdote peruano Gustavo Gutiérrez Merino y mas anteriormente Leonardo Boff y Paulo Freire –brasileños-. Esta corriente de pensamiento nació en un marco de cambios importantes durante el concilio de Medellín, donde se planteaba un mayor compromiso de los cristianos en el cambio social, lo cual llevó a un coqueteo y a la postre una empatía total con el Marxismo.
La visión de Quino sobre la “Teología de la liberación” |
Así pues, este grupo de teólogos y religiosos se solidarizan con los pobres y comienzan a hablar de liberación. Creando así un nuevo concepto de Iglesia, con un mensaje vivo y consiguen levantar un legítimo movimiento con miles de partidarios.
Es decir; la Teología de la Liberación es sobre todo una genuina iglesia de los pobres.
Cartel alusivo |
Pero bueno sigamos con Don Samuel. Quien fuera designado a la diócesis de San Cristóbal de las Casas en 1959 y de inmediato se percato de las inhumanas condiciones en que vivían –y viven- los indígenas, su trabajo pastoral en la diócesis formó a cerca de 100 mil catequistas que indudablemente nutrieron las filas y la mística zapatista.
El Obispo afirmaba que su trabajo no era mérito de una sola persona, sino de un grupo amplio de religiosos y laicos, pero desde luego que el empuje, las ideas, e innovaciones que cimentó, fueron fundamentales para una sólida estructura social.
Baste recordar que durante la visita de Juan Pablo II a Mérida en agosto de 1993, Don Samuel le advirtió de la visible explosividad de la realidad chiapaneca, incluso entregó al Papa un informe donde detallaba su inquietud, más sin embargo, su actitud fue tildada de exhibicionismo pastoral.
Don Samuel aprendió las cuatro lenguas indígenas más importantes en Chiapas: tzotzil, tzeltal, tojolabal y chol.
En 1989, instauró el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas, la Organización no Gubernamental con mayor credibilidad y peso en la entidad.
Tras el levantamiento del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), actuó como intermediario entre este y el gobierno.
El obispo apoyó los reclamos de salud, alimentación, tierra y justicia de la insurgencia zapatista aunque siempre señaló que no compartía el uso de las armas.
Con el Sub |
Con su intervención, las partes alcanzaron un acuerdo en 1996 donde las autoridades se comprometían a darle atención a las demandas zapatistas, sin embargo, el mismo gobierno caería posteriormente en un aberrante incumplimiento.
Su participación como mediador le acarreó amenazas de muerte, sin embargo también le valió una candidatura al premio Nobel de la Paz de 1994, misma que fue boicoteada conjuntamente por el Vaticano y el Gobierno de México.
Sus actividades derivaron en conflictos con la mayoría de los caciques locales y desde luego con el ala conservadora de su iglesia.
Don Samuel Ruiz - TATIC, como le llamaban en lengua tzotzil- es sin duda un claro ejemplo de quien prefirió:
Abajo y a la izquierda, por encima del cielo y a la diestra.
Tengo conocidos que apoyan esas ideas, y personalmente las prefiero 1000 veces antes que la idea tradicional de iglesia, aunque todos digan que solo están ahí para "Adquirir posiciones políticas" ¬¬
ResponderEliminarComo si en el Vaticano no se movieran hilos de la política internacional...
Es una lástima su perdida, esperemos que hayan más como él.